domingo, 28 de junio de 2020

Una lista de situaciones traumáticas y momentos de estrés. Primera parte.



Haciendo memoria, encuentro un montón de momentos complicados, en los que la cosa no estaba del todo bien, pero que forman parte de los recuerdos. Suficientes como para redactar una lista de situaciones traumáticas y momentos de estrés:

1. Nacer. Soy tan feo y lleno de pelo que mi abuela acusa al hospital de hacer cambiado a su nieto. Es la época de los niños robados. Yo tan negro y mi abuela tan rubia y de ojos azules y todo tan sospechoso que, apenas un momento después de haber nacido, cuestionan si soy lo que soy. El hospital es La Milagrosa de Chamberí. Cientos de niños robados en este Hospital en esos años.

2. Caer. Ando de forma tan extraña y desequilibrada que voy al suelo continuamente. Un día mi madre me zarandea y me pega una torta, harta de ver como me abro una y otra vez la cabeza, cada vez que salimos a la calle. No consigue entenderme: "¿Porqué no andas normal?". A pesar de mis pocas habilidades motrices, soy un niño sin miedo que se sube a todo lo que puede, por alto que sea, para caer accidentado una y otra vez.

3. Meto todas las cuchillas de afeitar, de mi padre, en los bolsillos del abrigo, justo antes de ir al médico. Creo que lo hago porque brillan y llaman mi atención. Cuando saco las manos de los bolsillos, delante del médico, chorrean de sangre llenas de pequeños cortes afilados. Mi madre grita sin entender nada. Un momento de absoluto terror. A mí no me duele. Luego, mi madre borra ese momento de su memoria, por siempre,  y nunca más habla de ese suceso.

4. Micro-recuerdos de mi hermano intentando matarme: 

  4.1. En el balcón de la primera casa de mis padres, en la Ciudad de los Ángeles, con un tubo de plástico largo, de las cortinas,  con el que quería atravesar mi garganta como si fuese Ivanhoe. No me mató, pero estuve jodido para hablar durante un tiempo.

  4.2. En los columpios de Pinarejos, en Burgos. Cuando aprovechó el mayor impulso del columpio donde me balanceaba,  para darme un golpe frontal donde caí al suelo, de espaldas y sin respiración y donde mis padres corrieron a ver si había muerto.

  4.3. Solos en casa siempre. Todo el tiempo. Porque mis padres siempre estaban trabajando. Por suerte para mi,  muy pronto me hice más fuerte que mi hermano mayor y entonces, dejó de pegarme. Poco después se sintió amenazado. Entendí muy pronto que era un cobarde.

  4.4. A mi hermano pequeño, nunca lo tocó. Por entonces, mi hermano mayor, ya me tenía miedo e imagino que su guerra era conmigo y no con el bebé. 

 4.5. Hace dos años, me ataca con una barra de hierro, el día que descubro que ha estafado a mis padres y robado todo su dinero. Le insulto llamándole: Ladrón, Hijodeputa, Saco de mierda y un montón de cosas igual de bonitas. También le tiro monedas a la cara que intenta esquivar justo antes de intentar matarme con la barra de hierro. Yo tengo cuarentaymuchos y el más de cincuenta.

4.6. Mi hermano mayor es el cáncer de mi alma, y de mis padres y de mi otro hermano y del agua que bebo. Es la mentira y el dolor y el golpe de realidad.

Mejor no sigo hablando de mi hermano mayor, porque la lista va sobre traumas en general y no sobre traumas de mi hermano.

5. El colegio al que voy, de pequeño, es de mi padre. Eso provoca la ira de algunos profesores. Recuerdo ser maltratado por una profesora que me deja sordo de una hostia y recuerdo pasar todo el año con cicatrices detrás de las orejas, que me escocían al bañarme. Se llama Luisa y me agarra de  las orejas y me levanta del suelo a pulso.
Nunca dije nada. Ella me decía que no podía decir nada. Y yo era demasiado pequeño como para defenderme.
Muchos años más tarde, ella trabaja en otro colegio en el que matriculo a mi hija María. Recuerdo pedir cita para hablar con ella y decirle sin testigos, que si en algún momento se acercaba a mi hija, e intentaba tocarla, recordase quien era yo y que podía matarla. 

6. Un verano en Burgos me atacan unos perros de caza. Vivo de milagro.  Tendré unos 12 años. Después de esto, durante muchos años tengo fobia a los perros. Luego lo supero, pero nunca tendré un perro, ni un gato, ni ningún animal. 

7. Ya tengo 17 años y todo es caótico. De repente todo se llena de música, fiestas, alcohol, cortes de pelo y anfetaminas. Me acuesto con la chica del cumpleaños y, una semana después, el ex-.novio de la chica del cumpleaños me quiere matar. Como no me encuentra, atropella a mi amigo al salir del instituto.

8. Peleas en las discotecas de Moncloa, los bajos de Aurrerá y la plaza de los cubos. Novias que te quieren y te dejan porque vas muy mal. Situaciones confusas que se borran en el recuerdo.

9. Mi padre y mi madre me hacen un interrogatorio. Me preguntan si tomo drogas, y yo les digo que no, pero que soy homosexual. En realidad no soy homosexual y sí tomo drogas.
Pasa el tiempo y creo que se sienten aliviados al descubrir que no soy homosexual aunque tome drogas.

10.Tengo 19 años cuando conozco a una chica que acaba de salir de un psiquiátrico y pocos años mas tarde tengo dos hijos con ella. Quiero a mis hijos por encima de cualquier cosa, pero mi vida con ella es el infierno.

11.Mi relación con la madre de mis hijos es lo más traumático que me ha pasado, aunque fuese un poco más tarde.

A los veinte años no sé muy bien que va a pasar, aunque ya presiento que no va a ser fácil lo que viene.

CONTINUARÁ...


Retrato del artista adolescente


"El fuego de la tierra destruye al mismo tiempo que quema, de tal modo que, cuanto más intenso es, tanto menos dura; pero el fuego del infierno tiene tal propiedad, que conserva lo mismo que abrasa y, aunque brama con indecible intensidad, brama para siempre."

James Joyce

viernes, 26 de junio de 2020

Suerte


Tengo Suerte. Siempre he tenido suerte. Mucha suerte.
Nunca he tenido otra cosa que suerte.
Y siempre le he dado mucha importancia a mi suerte.
Porque mi suerte siempre me ha salvado.

Caigo de pié.

No es una suerte que me haga millonario jugando a la lotería.
Ni es una suerte que me haga triunfar en el mundo del espectáculo.
No me hace popular ni casi famoso.
No es eso. Mi suerte es, casi siempre, más profunda.
Y otras veces, como de andar por casa.

Tampoco se trata de tener dinero.
Nunca he tenido dinero, porque todo el dinero que he ganado, siempre ha sido para dar.
Mucho dinero que nunca ha sido mío.
Porque el dinero nunca me ha pertenecido.

En cuanto al dinero, siempre he sido más bien el medio que el fin.
Una especie de conductor de cantidades variables en forma de transferencias destinadas a muchas razones por las que seguir trabajando.
Una responsabilidad.
Eso es el dinero.

Pero no quiero hablar del dinero, quiero hablar de la suerte.

En realidad mi suerte son las personas.
Conozco gente que haría lo que fuese por mí y conozco personas que me quieren de verdad.
También tengo suerte de querer a mucha gente, aunque no se lo diga.
Saben que yo no soy muy de cariños ni de abrazos.
Yo soy más bien distante y un poco ogro, pero con corazón.

Tengo suerte. Mucha suerte.
Mucha suerte en el amor.
Siempre digo: "Paola, que suerte tienes de haberme conocido."
Aunque en realidad es al revés.
Yo, Sí, que tengo suerte: "Paola, que suerte tengo de haberte conocido"

Ahora mismo pienso que:
Siempre he sido afortunado.
Siempre he tenido suerte.
Y siempre he vivido bien.


Miro a mi mujer durmiendo, mientras termino de escribir este texto.
Luego lo publico, apago la luz y duermo a su lado otro año más.
Otra vez empieza el Verano.
Tengo mucha suerte.

miércoles, 24 de junio de 2020

Mudanza



Me estoy mudando.
Así que, ahora mismo, soy un poco lo de antes en tiempo presente y un poco lo de ahora en tiempo pasado. En realidad no estoy ni aquí ni allá. Estoy en medio. Transportando cosas de un sitio a otro.
Mi ubicación en tiempo real está en la M30 en dirección al sur.
Adiós Malasaña!! Todos nos vamos y nos llevamos el barrio a pedazos y de corazón.
Los que se quedan, se quedan tristes, porque abandonar el barrio parece una perdida definitiva. Y en realidad lo es, porque la cara que queda del barrio cada vez es más parecida a cualquier promoción inmobiliaria de nueva construcción. El centro se vuelve elitista y cada vez más vacío de contenido.
Dentro de un año no quedará nadie en Malasaña que sea de Malasaña. Los barrios residenciales del norte de Madrid harán el desembarco definitivo al nuevo barrio residencial del Centro de Madrid: Malasaña, un nuevo lugar sin bares, sin movida, sin tiendas modernas, sin noche y sin día. Se acabó el Rock´N´Roll y llegó el silencio y la paz.
Un modelo de tranquilidad de millón de euros con vistas a la Gran Vía.
Nosotros nos mudamos.
Nos vamos.
Siempre prefiero lo que voy a ser, por que lo que ya he sido es un poco aburrido.
Hace demasiado calor para transportar estos 10 años pasados sin aire acondicionado.
Mañana más...

viernes, 19 de junio de 2020

ANUNCIOS POR PALABRAS



CUALQUIERA que conozca el paradero
de la compasión (fantasía del alma),
—¡que avise! , ¡que avise!
Que lo cante a voz en grito
y baile como si perdiera la razón
jubiloso bajo el frágil sauce
eternamente a punto de romper en llanto.

ENSEÑO a callar
en todos los idiomas
con un método de contemplar
del cielo estrellado,
las mandíbulas del sinantropus,
el plancton,
el copo de nieve.

DEVUELVO el amor.
¡Atención! ¡Ganga!
En la hierba de antaño,
cuando, bañados de sol hasta el cuello,
yacéis mientras baila el viento
(maestro del baile de vuestros cabellos).
Ofertas a “Sueño”.

SE BUSCA persona
para llorar
a los ancianos que en los asilos
mueren. Sírvanse
presentarse sin referencias
ni solicitudes por escrito.
Los papeles serán destruidos
sin acuse de recibo.

POR LAS PROMESAS de mi esposo
—que os engañaba con los colores
del populoso mundo, con su jaleo,
con una copla desde la ventana, con un perro
detrás de la pared—
de que nunca estaríais solos
en penumbra, en silencio y sin aliento.
—responder no puedo.
La Noche, viuda del Día.

Wislawa Szymborska

Trad. Elzbieta Bortkiewicz

Amigos de Facebook


Estoy casi al tope de amigos permitidos en Facebook, creo que son 5000, y no sé muy bien como he llegado a tener todos estos contactos.
A algunos yo mismo les he pedido amistad, porque me caían bien, pero todos los días me pide amistad mucha más gente, no tengo ni idea de donde vienen, quienes son, donde viven, que tienen que ver conmigo ni porqué me piden amistad. Yo no soy majo ni simpático, ni cuento chistes, ni tengo ganas de conocer tanta gente. Pero si me piden amistad yo acepto sin mirar. ¿Quieres ser mi amigo? Pues claro, ningún problema, seamos amigos. Ser amigos es estupendo. Me pides ser amigo y siempre digo que sí, luego me pides dinero y entonces ya digo que no, o me mandas porno o me etiquetas en una promoción cutre o en un mensaje contra o a favor de unas ideas que no son las mías y ya digo que no. Si quieres ser mi amigo, pues bien, pero si buscas algo más, por lo menos dime algo bonito antes de intentar follarme.
El presidente de la Asociación Española de Victimas de los Testigos de Jehová es mi amigo, yihadistas de varios paises son mis amigos, mujeres medio desnudas que luego envían videos porno por chat y que se describen con pezones rojos y coños pequeños son mis amigas. Estas mismas amigas son las que poco después me hablan en malas traducciones sobre problemas económicos de los que puedo salvarlas. Muchísima gente que ponen en su perfil la bandera de españa con el lazo negro y que luego son voceros de las consignas de la ultraderecha, son mis amigos. Me sorprende la cantidad de fascistas, falangistas, homófobos, racistas, xenófobos, nazis, protopedófilos y machistas que tengo de amigos. Secretarios de bancos extranjeros que quieren darme un préstamo. Fruterías que me etiquetan en sus promociones. Anuncios sobre como ganar tanto dinero como Chicote. Marie Le Pen quiere ser mi amiga y darme un crédito al 2%. La imaginación no tiene límites.
Antes, cuando no existía la red social, yo entraba en un bar y el tipo más colgado, más loco, más borracho, más delincuente o más hijodeputa tardaba menos de cinco minutos en localizarme y ser mi amigo. Los locos siempre han estado a mi lado, y siempre me han querido. A veces, incluso, me han protegido y dado la cara por mí. Siempre he estado bien con los locos. Los locos son mis amigos y yo soy amigo de los locos.
Ahora creo que desde que en los bares no se puede fumar, y tengo mujer y ya no me relaciono de esa manera, toda esta gente loca está en Facebook. Y pienso que en facebook la gente está todavía peor de loca que en el mundo real. Todo parece un experimento donde se lanzan insultos y amenazas de muerte ante cualquier comentario contrario a lo que uno piensa. Y donde la mentira si te gusta es más verdad que la verdad, porque a nadie le importa la verdad, si no es lo que te viene bien en ese momento.
Yo crecí en un barrio de mierda lleno de hijosdeputa que, por lo menos, si te ibas a dar de hostias no te mandaban un mensaje. No. Nada de mensajes. Te dabas de hostias y ya está.
A veces te dabas de hostias y luego te hacías amigo. Eso también pasaba. Y también pasaba, que tenías un amigo con el que te dabas de hostias y dejabas de ser amigo.
Todo era mucho mas fácil, y todo era mucho más físico y todos dormíamos con mucho menos estrés.
Insultar a alguien a través de un campo de texto en una pantalla no puede ser igual que darte de hostias con el contrario en medio de la calle o en un bar o en el patio del colegio. No es lo mismo.
Ahora tenemos Facebook e Instagram, donde la hostia no suena, porque lo que importa es la intención. La violencia es simulada y distante. La violencia verbal sustituye el contacto. La impunidad sustituye la valentía. El anonimato equivale a la cobardía. El mundo se simplifica y la identidad virtual se convierte en un ser irresponsable que patalea y berrea con la edad moral de un niño malcriado.
En la red, los amigos no son amigos sino posibilidades de amistad. No puedes ser amigo de un perfil que en realidad no conoces. Muchos te caen bien, te ríes con ellos, te enfadas con ellos, incluso compartes su dolor, pero al final no tienes puta idea de quienes son. No son tus amigos, son tus amigos de Facebook, y tú no vives en Facebook, por ahora.
El experimento consiste en una sociedad por siempre confinada donde la amistad se gestione al 100% en Facebook o Instagram.
Pronto en sus pantallas

jueves, 18 de junio de 2020

Matar a un Negro


Todo el mundo se lanza a la calle por la muerte de George Floyd en los Estados Unidos y en Europa y en el resto del mundo. Todo el mundo expresa su indignación en Francia y Bélgica y en Italia y en España y en Madrid y en Barcelona.
Hasta en Lleida protestan por la muerte por asfixia de un negro asesinado por un policía racista norteamericano de Minneapolis, pero no reciben en sus hoteles a negros aunque quieran pagar las habitaciones. 

En Madrid y Barcelona todos se arrodillan y ponen el puño negro en alto, pero nadie contrata a un negro en  atención al público, ni en servicios, ni en un comercio,  ni en una oficina, ni en ningún sitio. Los negros son temporeros y manteros y son negros y no pueden tener un contrato, ni derechos como los demás.

Ahora hay partidos políticos que se quejan de que estos negros puedan tener asistencia sanitaria, porque, según dicen, atender a un negro es quitarle un derecho a un madrileño, o a un catalán, o a un murciano. Ya se sabe, que estos negros llevan mucho tiempo viniendo a este país a quitar el trabajo, infectarnos de enfermedades y violar a nuestras mujeres.

En la España del invernadero se les pagan limosnas y viven en chabolas, pero nadie dice nada y todo está bien. Son negros y no les hace falta nada, porque vienen de un lugar donde tampoco tienen nada. Los negros no tienen derechos y viven al margen de la sociedad. Conseguir la nacionalidad española a un negro que viene de África tarda décadas y es extremadamente difícil.  Los negros se ahogan todos los días en el mar Mediterráneo y se mueren en carreras policiales por Lavapiés o cualquier barrio de Barcelona y ningún blanco ha hecho una manifestación hasta ahora, ni se ha puesto de rodillas, ni ha levantado el puño negro para protestar por esta falta de justicia ni de ausencia de derechos humanos.

Pero ahora de repente, la muerte de George Floyd, en Estados Unidos, es mucho más importante que la muerte de cualquier otro negro corriente en las costas de nuestro país, incluso mucho más importante que los negros que se desgarran cualquier día desde hace años con las concertinas de Ceuta o Melilla. Nadie se manifestó cuando el ministro Jorge Fernandez Díaz mandó poner una doble concertina o defendió el derecho español de disparar negros en el mar mientras se ahogaban intentando llegar a la costa. "Devolución en caliente" es una frase que no sonaba ni mal. Se supone que estas concertinas se mandaron retirar con el siguiente gobierno, pero a nadie le importó la medida. Nadie se manifestó celebrando la retirada de esta atrocidad, igual que nadie antes se manifestó en contra de esta atrocidad.

Ahora tenemos un buen marketing de la nueva plegaria global. Pedimos que importen las vidas de los negros, pero en realidad no veo que a nadie le importe mucho más allá que el propio Slogan.

La nueva religión global es el miedo a la culpabilidad. O eres culpable o te sientes culpable o te evades de la culpa.
Mi madre siempre ha tenido el mismo problema. Nunca pudo con la culpa y toda la vida ha acudido a sentirse mejor en una Iglesia. Lo sigue haciendo. Para ella lo peor que le puede pasar es ser responsable de un error o culpable de una acción. La educación católica es así.

Ahora es un poco lo mismo. En este caso, se trata de tener pruebas fotográficas de haber estado en el centro de una gran ciudad arrodillado y con el puño negro en alto, y así poder tener la disculpa social de no ser un racista, aunque le importa una mierda que naufrague una patera llena de niños del color que sea en tu propio mar: El Mar Mediterraneo. En el que te bñas una vez que han apartado a los negros que flotan.

Es más fácil solucionar tu posición moral con un negro de los Estados Unidos con nombre y presencia mediática que preocuparte de los miles de negros africanos que puedan morir cada año con nombres que nunca recordarás.

Conciencia ética milenial autocomplaciente, postureo ético, nueva normalidad, patriotismo ultranacionalista, izquierda de barrio residencial y un montón de términos cercanos al vacío.

Ahora mismo, todo el mundo es cada vez más egoísta.
Y cada vez importa menos.

En realidad nadie está dispuesto a partirse la cara por sus ideas.
Yo estaría dispuesto.

Veo mucha gente evitando la culpa en favor de un buen marketing, buscando la frase correcta para aparecer en un hashtag con likes. El sitio natural de todos nosotros forma parte de un algoritmo.

Eso dicen.


miércoles, 17 de junio de 2020

Happy Mondays y buenos sentimientos.



Shaun Ryder, loco de atar y genio sin ataduras. Líder. compositor, voz y bocazas. Era el perfecto ejemplo de adicto al sexo, a las drogas y al rock and house. Filosofía que convirtio en seña de los "Mondays".
...
1.- Escucho en la radio que reeditan los discos de los Happy Mondays.
2.- Loose fit
3.- Recuerdos dextroanfetamínicos.
4.- Dennis And Lois
5.- La película sobre Tony Wilson, fundador del sello Factory, toma título de un tema de su debut largo en 1987:"Squirrel and G-Man Twenty Four Hour Party People Plastic Face Carnt Smile (White Out)"...
6.-"Es una mierda. Aquello no fueron los hechos. Puedo disculparlo porque era una película de entretenimiento, pero el guión se cambió y acabó hablando de ficción y no de realidad. Yo no anduve metido en líos de gánsteres, por ejemplo. Agradezco que me tuvieran en cuenta, pero no era la verdad".
7.- Step on
8.- Mark Berry, alias Bez. Era bailarín y percusionista. Como Shaun, lucía currículum de detenciones desde adolescente. Nadie diría que el padre de Bez era jefe de policía en la vecina Liverpool.
9.- La banda empieza a dar la brasa en 1980 aunque casi todo el mundo sitúa su inicio en 1982. Crecen en Little Hulton, barrio obrero de Manchester.
10.- 1990. Domingos que empiezan al mediodía. Lunes olvidados. Qué es una Rave?. El tercer vinilo que sacaron con Factory fue el single "Kinky Groovy Afro", en 1990.
11.- New Order, antes Joy Division, y Stone Roses completan la santísima trinidad del sonido Manchester.
12.- Madchester, donde está Manchester?
13.- "Pills n´ The Thrills and Bellyaches"
14.- Estaba en un bar, escuchaba toda esa música oscura y Punk, nadie se mueve, todos se miran. Poco después me puse a bailar, todos bailan, nadie se mira. Hallelujah!
15.- Después de esto llegaron los clubs, las macrodiscotecas y las noches infinitas, que durante una época lo llenaron todo. Alguien dijo: “La música está cambiando”, aunque eso creo que fue un poco más tarde.
...

Happy Mondays
y buenos sentimientos.

domingo, 14 de junio de 2020

Jesus and Mary chain... Que se joda el mundo


Jesus and Mary Chain es el grupo del que realmente he sido un fan. Y eso que me cuesta ser un fan de casi cualquier cosa. Pocas cosas hay que no cuestione y los Jesus son una de esas pocas cosas. Mi grupo favorito, aunque suena un poco idiota. Pero al final es verdad que es mi grupo favorito.

Si me dicen que me gusta, yo digo: Me gustan los Jesus and Mary Chain y que se joda el mundo.

Tengo muchos recuerdos alrededor de los jesus and Mary Chain.

Recuerdo pinchar Surfin'U.S.A. del Barbed Wire Kisses en la radio, en un programa que me invitaban a poner y comentar novedades, a mi manera, al final de los ochenta. Era la época de las radios independientes y me dejaban hacer

Recuerdo horas y horas en mi habitación escuchando el Psycocandy, y recuerdo a Servando Carballar de Aviador Dro decir en Radio3 que después Psycocandy la música anterior se había ido a la mierda, bueno, con otras palabras, pero yo estuve totalmente de acuerdo.

Recuerdo ver el video de Some Candy talking en los bajos del discoplay de gran Vía, en esa máquina que era como un jukebox de vídeos. Y recuerdo saltar y gritar en las escaleras, delante del televisor, con mis amigos, porque era la única forma de escuchar esa canción que no estaba, entonces, en ningún disco.

Por esas fechas Neil Taylor decía desde las páginas del New Musical Express:  " Jesus and Mary Chain son el mejor grupo del mundo", el público convertía en una batalla campal cada uno de sus incendiarios conciertos y ellos, altivos, arrogantes, auténticos hoolingans del ruido lo sabían: el mundo era suyo.

Recuerdo comprar y escuchar por primera vez cada uno de sus siguientes discos. Y recuerdo entenderlo todo: Darklands, Automatic, Honey's Dead, Stoned&Dethroned y Munki 

Recuerdo la mala hostia que despliegan los hermanos Reid en todo momento y la ira contenida en cada una de sus canciones. La tensión. Y como cada palabra y riff de guitarra se alarga para que entre, como un taladro, en tu cabeza.

Recuerdo que ponían a parir el Automatic y a mí no me podía gustar más. Todos los días escuchaba el "Blues from a Gun" y el resto del disco.

Recuerdo estrellarme en coche escuchando "Black" de Munki. Y recuerdo que estaba borracho y que llevaba tres días sin dormir, y que la anterior semana había trabajado mucho todo el día y toda la noche, y que en medio de todo esto se había casado mi hermano mayor y recuerdo que yo estaba en su boda como un zombi y recuerdo que todavía aguantaba la situación con mi ex, con la que me estrello esa misma noche. El caso es que, después de todo esto, conduzco borracho y cansado y escuchando el Black de los Jesus y nos empotramos contra una fila de coches de una calle sin salida de Parla. Y recuerdo que rebobino el cassette, vuelvo a poner la misma canción y salimos como si cualquier cosa. Y nos vamos a un bar donde seguimos de fiesta, y no se muy bien como volvemos a casa, pero recuerdo que volvemos escuchando una y otra vez la misma canción. 

Recuerdo la pared llena de las portadas de mis vinilos de los Jesus and Mary Chain.

Recuerdo saltar y saltar en el concierto del Festimad de Móstoles de un año muy lejano y recuerdo saltar y saltar en la vuelta de la sala Riviera, hace poco, cuando volvieron y sacaron "Damage and Joy".

Todo está bien. me siento bien escuchando Jesus and Mary chain... Y que se joda el mundo


sábado, 13 de junio de 2020

Escuchando a los Sex Pistols


"Never Mind the Bollocks, Here's the Sex Pistols" es el disco que más veces he escuchado. Desde los 15 años y hasta ahora, una y otra vez, todo el tiempo. 

La banda sonora de mi vida empieza aquí.
Aclaración: Este disco no se puede escuchar bajito.

Porque este disco es una forma de ser y de pensar y de cuestionar absolutamente todo. Y lo hace con toda la energía y la violencia posible. "La Ira es una Energía" decía unos años más tarde John Lydon. 

Estuve viendo a P.I.L. el 16 de Octubre de 1986 en la Sala Astoria de Madrid. Yo entonces tenía 16 años y sudaba agitado en la pista mientras John Lydon berreaba, sin parar, slogans que me llegaban al alma y que me definirían para siempre. Yo entonces era un Punk adolescente que respiraba deprisa porque todo era emocionante.

En la barra de atrás, sin hacer mucho caso al concierto, estaban los Almodovar y los Berlanga y todos los hermanos mayores que ya por entonces parecía que todo les daba un poco igual. La gente de la Movida Madrileña que a nosotros nos parecían todos unos pijos que iban de modernos. Nosotros eramos de barrio de las afueras y estábamos mucho más enfadados y todo nos parecía importante.

John Lydon era un héroe jorobado. Era un Sex Pistols. Un Hijodelagranputa. Le adorábamos. Todos los chavales del extraradio queríamos abofetear al rey y a la reina y al principe y a las infantas y pasábamos de la movida y de Alaska y de toda esa mierda edulcorada y patrocinada. Eramos Punks. Lo que nosotros queríamos era reventarlo todo, colocarnos de anfetamina y quemar el congreso. Unos hijos de puta con imperdibles en las orejas. Nos metíamos en peleas y pensábamos que merecía la pena.

La entrada al concierto la conseguí participando en un concurso de dibujo de una revista de música de la época, creo que la revista era Ruta 66, pero no estoy seguro, ya no me acuerdo. Tenía que hacer un dibujo de Johnny Rotten, el cantante de los Sex Pistols. Dibujé a Rotten y gané el concurso. Me enviaron dos entradas. Una para mi y otra para mi amigo Fernando. 

Al finalizar el concierto, como eramos unos chavales sin dinero de los suburbios, volvimos a casa corriendo por una M30 que entonces no tenía túneles. Recuerdo correr por el arcén justo antes de llegar a la Avenida de Andalucía, Ciudad de los Ángeles y Villaverde, con sonrisa de idiota pensando ser parte de la historia.

Todo un Sex Pistols.

jueves, 11 de junio de 2020

Escuchando KID A de Radiohead



En el año 2000, en el coche, un Sábado por la mañana. Voy a ver a un cliente, se llama Manuel, que por entonces también era amigo y que después dejó de ser amigo, y después dejó de ser cliente, y más tarde su local dejó de ser un local moderno y se convirtió en un "chino" donde vendían botes de cerveza. Pero esa no es la historia. El caso es que por entonces los sábados por la mañana los dedico a visitar clientes y el caso es que muchos de ellos son también amigos.

En el año 2000, en el coche, un Sábado por la mañana. Tengo una cassette grabada de Radiohead, que me regaló Emilio. Lleva varias semanas rodando por el coche, y no le he hecho ningún caso.

Emilio me dijo: "Tienes que escuchar ésto".
Y Yo dije: "Vale", y no dije nada más.
Pero por entonces toda la música del mundo me daba igual.

Pensé que hacía tiempo que Kurt Cobain había muerto y que no tenia ganas de escuchar más de lo mismo. Y menos aún, más de lo mismo, de un grupo del que pensaba que no era más que las ventas de discos que Nirvana ya no haría nunca.

Pensaba que la música se había vuelto aburrida y repetitiva y que la electrónica era lo que tocaba escuchar poniendo cara de pasar un poco de todo con ayuda de las drogas necesarias o innecesarias. Pensaba en todo eso que se llaman prejuicios, mezclados con una depresión de la que poco a poco estaba saliendo.

Porque por entonces, por primera vez en mi vida, había dejado de escuchar música. Durante un tiempo, no quise saber nada de música. Estaba a menos que cero. Por entonces, tenía casi treinta años y dos hijos y una ex-mujer que me quería asesinar, y que me quería asesinar de verdad. Y lo había pasado fatal y apenas estaba saliendo de la muda de piel, de lo que no era, para volver a intentar lo que en realidad soy. 

Estaba mal, muy mal, peor que mal. Nadie sabía lo mal que estaba, pero estaba muy mal. Ni yo sabía lo mal que estaba, porque solo pensaba en mis hijos y en evitar que mi ex-mujer acabase conmigo cualquier día o cualquier noche. Porque, a pesar de estar separados, seguíamos follando.

Estaba totalmente trastornado, triste y demente. No sabía a donde iba y no tenía sensación de que existiese un futuro sino un momento final.

Ahora lo sé, estaba deprimido, pero por entonces, simplemente conduzco a ver un cliente como cualquier Sábado por la mañana.

El disco se llama "KID A", y lo pongo. Al cabo de 10 minutos tengo que parar el coche. No me creo lo que estoy oyendo. En ese momento pienso que es lo mejor que he escuchado en toda mi vida, mis neuronas están desatadas. Es una Revelación, una Epifanía, casi me pongo a llorar. A la vez pienso que ésto no se repetirá jamás, que este momento es único. Siento el calor y el sol y respiro profundo atrapando ese preciso momento. Llamo a Emilio y le digo todo ésto, y le digo que tenía que llamarle porque no podía creer que se pudiese hacer una música como ésta. Y le digo que si todavía se puede hacer algo así, entonces todavía se pueden hacer cosas, que creo en la pintura, en la poesía  y que sigo creyendo en el amor y la amistad  y que hay  esperanza, y que creo que hay sitio para algo más. Que todo se puede solucionar. Que me siento igual de triste que cualquiera de las canciones que estoy escuchando, pero que he descubierto toda la belleza que existe en mi tristeza, y que mi tristeza me puede salvar. Le digo que el día que Kurt Cobain se pegó un tiro, yo hubiese hecho lo mismo pero que no lo hice porque aquí no hay armas en las casas. Que ese día estaba tan triste como Kurt y que lo entendía todo.

Nunca pensé en matar a mi mujer, pero muchas veces pensé en desaparecer.
La música volvió de repente a hacerme comprender.
De repente, entró un montón de música más en mi ánimo, cada vez más entero, cada vez más lleno de amor y esperanza.

Ese año escuché Radiohead una y otra vez, pero también escuche otras muchas cosas y la música me acompañó, como antes siempre lo había hecho y pensé que podía vivir otras vidas propias, y que igual que la música cambiaba, yo también cambiaba. 

Ahora, sigue siendo igual. La música es lo que me hace sentir, mucho más que cualquier otra cosa.
Y eso es poco más o menos lo que recuerdo, escuchando el Kid A de Radiohead.
A propósito de la música que te ha hecho ser lo que ahora eres.

martes, 2 de junio de 2020

Sobre el Tiempo


Nada sucede dos veces. Aunque a veces parece que todo se repite una y otra vez, cada día que pasa. Pero no es así, somos nosotros los que buscamos la repetición, la rutina y el momento pausado. El mundo no es así y la naturaleza tampoco. El tiempo solo le importa al humano.

Estamos empeñados en detener el tiempo. Inventamos los relojes y luego inventamos las horas y los minutos y los segundos y ahora ya ni nos sirven los segundos y estamos intentando atrapar la más mínima parte a la que podamos descomponer un segundo. Porque en la infinitesimal parte de un segundo se encuentra nuestra vida, y más que la vida, se encuentra nuestro valor.

El tiempo es una forma de control: Ciclos de facturación, horas trabajadas, tiempos de desplazamiento, horas extra, hipotecas y venta a plazos, descansos minutados y muchas más medidas de tiempo orientadas al uso productivo de la vida de un trabajador. La administración del tiempo se traduce en dinero

Pensar en el tiempo te hace entrar en la paranoia de lo productivo. "El tiempo es dinero" dicen, y despojan al cuerpo de cualquier valor fuera de una producción útil constante, traducida en beneficio económico, intereses y vencimiento de cuotas.

Así, de esta manera, cada vez que miras el reloj, dejas de mirar tu momento o tu cuerpo y dejas de mirarte, a ti mismo, para mirar el dinero que debes o que produces o que te deben o que estás ganado o perdiendo. El mismo dinero que necesitas para tener un poco más de tiempo, mientras te haces mayor, envejeces y finalmente te mueres, con o sin dinero, porque al final el tiempo es el mismo. 

El tiempo siempre se acaba.

lunes, 1 de junio de 2020

Corre por tu vida


Camina bien lejos, y si puedes correr, corre. Escapa a cualquier otro sitio donde nadie te conozca. No busques un paraíso, porque los paraísos ya no existen. Tampoco existen los lugares tranquilos y apacibles. Las grandes oportunidades han dejado de existir, y creo que también han desaparecido las segundas oportunidades.

No busques un lugar tranquilo. No existe la campiña inglesa ni la toscana italiana ni el fiordo encantado ni la calle perfecta ni la avenida limpia ni el policía amable ni las segundas oportunidades.

Ahora, amanece y te duele la cabeza. Como no puedes hacer nada, no haces nada. Estás, pero no haces nada. Estas vivo, pero no puedes pagar el recibo de este mes. Y el mes se termina y empieza otro mes. Y siempre así. Ese tipo de lógica sin continuidad.

Piensas que has vivido equivocado pensando que el amor te salvaría. Que te mantendría a flote. Y ahora, que no queda nada, en realidad es verdad. Es el amor lo que te hace seguir adelante. Anónimo. Rumbo a ninguna parte. Con humor. Triste pero riendo. Comentas las últimas noticias de prensa. Y vuelves a enamorarte. Y otra vez. Cada mañana. Cada mañana, en el desayuno te vuelves a enamorar. Amanece y te duele la cabeza. Ella. Dice que falta pagar el siguiente recibo. Y así. Una y otra vez. Cansado pero enamorado. Sacando fuerzas donde no hay y volviendo a intentarlo. Por amor.

Todo bien


Todo está bien y todos estamos bien. Las calles se llenan y la carretera se llena y todo se llena. Las mascarillas a veces se llevan y a veces no se llevan. Las terrazas se llenan y las caceroladas en barrios pijos, se acaban en favor del Gin Tonic, en terrazas de barrios pijos. Playas y parques de botellón. Fiestas privadas. Reuniones familiares. Concentraciones en los barrios, alrededor de los "Chinos", para beber cervezas.

Los muertos se olvidan tan rápido como se olvidan los aplausos. 
Un día te dicen que aplaudas y aplaudes. Otro día te dicen que no aplaudas, y no aplaudes.
Nadie me explica el porqué. Es así, es lo que dicen en televisión.
Ahora aplaudes, ahora no aplaudes.

Yonquis de la actualidad que ayer lloraban por nadie y hoy beben por todos, tratando de mantener el chute de contemporaneidad a golpe de like y de instagram y de perfiles varios en redes sociales. Protagonistas de todo: De estar confinado, y de intentar buscar algún familiar por lejos que sea que se muera para poder tener quién llorar, y luego superarlo y hacer pan casero y ejercicio y poder hablar de la experiencia de salir a caminar y de ver a los amigos, y lo que sigue. Puto coñazo de gente y cultura milenial. Diarios del confinamiento. Merchandising del virus. Influencers en casa. Todos mirando y comentando.

En televisión hablan de Cero Muertos y de la apertura de los centros comerciales. Casi en la misma frase nos dicen: Estás vivo, y hoy que no ha muerto nadie, siéntete alegre porque en medio país abren los centros comerciales. Ya eres de nuevo un ser completo, que vive. respira y consume. La gente aplaude a la entrada del Corte Inglés y el Corte Inglés aplaude la entrada de sus clientes. Las cámaras esperaban el momento, sabiendo que sería un momento emocionante digno de transmitir en los telediarios.

Todos estamos bien. Estamos vivos y no tenemos trabajo. No sabemos que hacer. Los bancos siguen buscando el beneficio. Nuestra derrota sigue siendo su beneficio. No sabemos que va a pasar y nos resistimos a pensar que todo consiste en que la nueva normalidad consista en la reapertura de los centros comerciales, porque la mayoría vivíamos al día, y el día a día se acabó hace ya tres meses. 

Además, el día de mañana no cuenta con nadie. No ha dado tiempo a saber si estamos perjudicados o totalmente arruinados, si eres población activa o pasiva o si estamos en fase de exclusión. Nuestro futuro empieza ahora.

Estados Unidos está ardiendo, y el presidente se mete en el bunker de la Casa Blanca esperando un asalto. 

El mundo entero está a punto de explotar.
Todo está bien y todos estamos bien.
Estamos vivos y llega el verano.
En la televisión dicen que empecemos a planear las vacaciones.