Aceptamos todo.
Al principio hacemos como que nos importa, pero luego está claro que no nos importa y que lo aceptamos todo. Todo con tal de seguir con nuestras vidas sin que nos molesten más.
Aceptamos el cambio climático y que el mundo se agote.
Aceptamos que España se convierta en un desierto.
Aceptamos la guerra de Ucrania después de un par de meses.
Aceptamos un la posibilidad de un gobierno de ultraderecha que nos hable de odio si no nos odian a nosotros.
Aceptamos vivir en Madrid con A.Y.U.S.O.
Aceptamos una guerra mundial.
Aceptamos infectarnos de nuevos virus.
Aceptamos la monarquía.
Aceptamos la corrupción.
Aceptamos vivir cada vez peor.
Aceptamos una lista interminable de situaciones insoportables, inaceptables.
Aceptamos todo.
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