El chico decía que había decidido que las cosas ya solo serían:
O en blanco. O en negro.
Y que desde que las cosas eran así, ya no había que estar aceptando mierdas entre el blanco o el negro. "O sí", "O no". No me jodas con los matices. no me jodas con el "PERO", ni con el "SIN EMBARGO", no me jodas con el "ENTIÉNDELO".
Saco la lengua y te lo digo así: Las cosas no son "depende de...", ni tampoco son "pensamos que era mejor así".
Mira chaval, tengo ya cuarenta años para aguantar tus mierdas.
Y tengo un montón de cadáveres detrás.
Amigos que no son amigos. Conocidos que ya no quiero re-re-conocer. familiares que no son mi familia. Ex de las ex-temporadas en las que tenía ex. Tengo ausencias de recuerdos, y tengo caminos de los que no recuerdo ni las salidas comarcales. Tengo empresas quebradas, cerradas, clausuradas. Tengo fatiga para según qué cosas. Tengo mogollón de descartes, discos en la basura, cuadros quemados, papel hecho pedazos, manuales que ya no sirven. Canciones que no me dicen nada, cuando antes me lo decían todo. Tengo recuerdos que no recuerdo, y que me recuerdan los demás. He dejado tantas cosas, que me construyo con lo de hoy, me visto con lo de hoy, creo en lo que leo hoy. Soy lo que soy hoy. Y hoy no me vas a joder. No. Hoy no me vas a Joder.
Claro que tú, todo esto no lo sabias.
Pero ahora, ya lo sabes.
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