Se llama arrebol al color rojo que se advierte en las nubes iluminadas por los rayos del Sol, especialmente al amanecer y a la caída de la tarde.
En Madrid vivimos casi todo el año arrebatados por los arreboles constantes de nuestro cielo, llenos de naranjas y rosas y turquesas. Sorprendidos siempre ante estos atardeceres tan fantásticos.
Hipnotizados y llenos de esperanza por lo que pueda pasar al día siguiente.
Madrileños enamorados de la vida y del sentirse arrebatado. Amantes arrebolados por Madrid. Arrebolados, arrebatados y enamorados. Seas de donde seas, porque si estás en Madrid eres de Madrid.
Rolando Alarcón canta: Si te quieres casar con la chica de aquí, tienes que ir a Madrid a empuñar un fusil.
Esta primavera es la primera después de dos años. Ahora todo florece. Todo resiste. Todo huele mejor.
Camino por Recoletos a media tarde. Deprisa, como siempre. Miro hacia arriba: Cielos ensimismados que desafían mi fascinación.
Mas tarde, monto en un tren que me lleva a casa. Cruzo el manzanares cuando se hace de noche.
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