lunes, 8 de diciembre de 2025
La ciencia y la industria deciden las guerras
Podría ser que la ciencia y la industria, junto con su progreso, fueran lo más duradero del mundo actual. Que toda presunción de un derrumbe de la ciencia y la industria sea por ahora y a largo plazo un mero sueño; y que tras infinitas calamidades la ciencia y la industria unifiquen el mundo, con ello me refiero a que lo resuman en uno, en el que, desde luego, vivirá cualquier cosa antes que la paz.
Pues la ciencia y la industria deciden las guerras, o así lo parece.
¿Cuál es la frecuencia?
Muchas veces me pregunto si no es que me expreso o pienso en una frecuencia diferente, donde mi lógica se distorsiona hasta hacerla poco comprensible. El caso es que casi ni entiendo la mayoría de las cosas que suceden a mi alrededor, y eso hace que poco a poco me distancie cada vez más.
Pienso que llegará un día en que solo escuche el silencio de mi decepción.
domingo, 30 de noviembre de 2025
¿Cómo va la historia?
He llevado una máscara todos los días, tú te asomabas por detrás y ahora quiero irme
Y las cartas están echadas y la casa está llena y quiero irme a casa
Y las cartas están echadas y la casa está llena y quiero irme a casa
Todo el mundo tiene tiempo
Todo el mundo parece tener mucho tiempo (¿De verdad, te estás quedando sin tiempo?)
Todo el mundo parece tener mucho tiempo, pero yo estoy desperdiciando el mío
Juro por Dios que soy el único cabrón de este lugar al que no le va bien
Y yo no estoy bien
Tú eres el extrovertido, yo soy el introvertido, y esos son los roles
Entonces yo soy el extrovertido, tú eres el introvertido, y el intercambio continúa (Odio hablar)
Las cartas están echadas y la casa está llena y quiero irme a casa
Hemos hablado todos los días durante ocho años, ¿qué hago cuando te vas?
Y todo el mundo tiene tiempo
Todo el mundo parece tener tanto tiempo (¿De dónde sacan todo el tiempo?)
Todo el mundo parece tener tanto tiempo, pero yo estoy desperdiciando el mío
Juro por Dios que soy el único cabrón en este lugar que no lo está haciendo bien
Y no estoy bien
Y no estoy bien, no estoy bien (No, no lo estoy)
Y no estoy bien, no estoy bien
No estoy bien, no estoy bien, no estoy bien, no estoy bien
No estoy bien, no estoy bien, no estoy bien, no estoy bie
Las cartas están apiladas y la casa está llena y quiero ir a casa
Y las cartas están apiladas y la casa está llena y quiero ir a casa (Realmente no me gusta)
Y las cartas están apiladas y la casa está llena y quiero ir a casa (Solo quiero ir)
Y las cartas están apiladas y la casa está llena y quiero ir a casa ¿
Podemos irnos ya?
Nada de lo que eres serás mañana
Nada de lo que eres hoy, serás mañana.
No importa el pasado ni el futuro,
tal vez importe el presente.
Tal vez importe por un tiempo,
el presente, mientras dure.
Vives siempre en el verbo presente
y en el siempre ahora.
Nada ni nadie te pertenece,
solo te acompañan o no.
El tiempo pasa y el presente se llena y se vacía,
todo el tiempo, de la gente que te acompaña.
La gente viene y va y pocos son los que se quedan.
Aún así, avanzas confiado hacia la oscuridad, sin saber porqué.
Tal vez sea por rutina.
Qué tarde...
domingo, 23 de noviembre de 2025
¿Quién te venderá mañana?
¿Quién te venderá mañana?
Solo te pueden vender los más cercanos. Solo vendes algo cuando lo ganas y lo tienes, lo posees. A Jesús le vendió su compañero más fiel, a quien no le hacía falta el dinero. Lo vendió porque podía.
Quien no te conoce no te puede vender.
Lo humano es así: Te acercas por curiosidad y luego lo devoras todo y a todos. Por que puedes.
Hay tiempo para todo
Hay un tiempo para burlarnos y otro para que se burlen de nosotros, como hay un tiempo para beber cocktails y otro para vomitarlos.
Una soledad demasiado ruidosa
Somos el reflejo
Los espejos deberían pensárselo dos veces antes de devolver una imagen.
La única cosa totalmente nuestra, nuestra imagen, en realidad es todo menos nuestra. Nuestra imagen es de los demás y a nosotros solo nos pertenece la fe en lo que el espejo nos devuelve. Creer en nuestro reflejo ya es apostar por un mundo imaginado, confiar en el criterio ajeno y dar por cierto lo que te cuentan, incluso de ti mismo.
OSCURIDAD
jueves, 20 de noviembre de 2025
Tal vez en democracia
viernes, 17 de octubre de 2025
Sobre la pintura
Siempre he creído en dibujar con lo más esencial, lo más barato y lo más fácil de conseguir. Un lapicero o un rotulador de los que compras en cualquier tienda o bazar, donde también puedes comprar un refresco o un cargador del móvil, es más que suficiente. Papeles de supermercado y pinturas de polígono donde la pintura es de pared. Loneta de algodón de almacén, imprimada con pintura plástica de pintor de casas. Bastidores de madera de wallapop o de mayorista chino. Lo barato, lo popular, lo fácil de conseguir es el tipo de soporte que me interesa.
No necesito grandes cosas y no voy a buscar lo mejor en las tiendas de bellas artes. Sé que mi trabajo parece un poco peor por no dedicarle tiempo a aplicar mejores materiales. Sé que parece plano, superficial y vulgar, pero es eso mismo lo que me interesa. Porque mi trabajo es plano, superficial, vulgar y la mayoría de las veces innecesario.
No necesito que mi obra me trascienda. Me da igual lo que pase cuando yo muera. Mi trabajo me ha servido para tener la vida que he querido tener y eso para mí es más que suficiente.
REGRESO A LOS SAPOS
¿Quién no prefiere pasear
por el parque a trabajar?
El lago, el sol,
hierba donde echarse,
lejano rumor de críos
y niñeras de medias negras:
no está mal el lugar.
Pero no es para mí,
no soy uno de esos tipos
que te encuentras por las tardes:
hemipléjicos que apenas andan,
oficinistas con temblores,
pacientes de carne cérea
aún con secuelas del accidente,
y personajes de abrigo largo
que hurgan en las papeleras:
gentes que esquivan el sapo del trabajo
por estúpidos o por débiles.
¡Imagínate ser como ellos!
Oír cómo dan las horas,
ver cómo traen el pan.
el sol que se oculta tras las nubes,
los niños que vuelven a casa;
imagínate ser como ellos,
ir rumiando tus fracasos
junto a un lecho de lobelias,
no tener adónde ir
ni más amigos que unas sillas vacías.
No, dadme mi montaña de papales,
mi secretaria con permanente,
mi le-paso-la-llamada-señor:
¿qué más puedo responder
cuando las farolas se encienden a las cuatro
y acaba ya otro año?
Dame tu brazo, viejo sapo,
tomemos la Cuesta del Cementerio abajo.
No hay nada de malo en el silencio
No hay nada de malo en el silencio.
Aunque en las ciudades sea difícil de encontrar y en Madrid casi imposible.
Imagina Madrid en silencio. No es posible. Son cosas contrarias el silencio y Madrid. Nadie piensa en Madrid en silencio. En Madrid el ruido lo llena todo. La palabra interrumpe el silencio. La gente interrumpe el silencio. Los motores interrumpen el silencio. El silencio no existe en ninguna de sus posibilidades, porque no hay espacio para el silencio en Madrid. En Madrid el ruido es como el sonido del mar cuando duermes. Algo casi necesario.
En la ciudad el silencio es una amenaza. Una ciudad que permanece en silencio es una ciudad temerosa o muerta. El silencio en las ciudades es sinónimo del fin.
Ahora me alejo de la ciudad y me reconcilio con el silencio. Voy y vengo de Madrid todo el tiempo. Me alejo y descanso del ruido. Gano tiempo intentando fabricar una nueva vida. Otra vez empezando de nuevo y dándome una nueva oportunidad lejos de la ciudad, donde habita el silencio y el tiempo se parece a las horas del día.














